viernes, 1 de julio de 2016

Osorio Chong...la antípoda del "Pollo" (Gutiérrez Barrios)

  •  LAS AMENAZAS...LAS PURAS AMENAZAS DE GOBERNACIÓN

  •  ¿POR QUÉ SE HAN DEJADO CRECER LOS CONFLICTOS POLÍTICOS EN ESTE SEXENIO?

  •  FRACASARON LOS ENEMIGOS DEL SECRETARIO DE EDUCACIÓN PÚBLICA, AURELIO NUÑO


De JOSÉ A. PÉREZ STUART


Ya voy para cuatro años que, al observar el actuar de Miguel Ángel Osorio Chong como secretario de Gobernación de México, y lamentar el deterioro de la estabilidad política de dicho país, me acuerdo del hijo de Angelita, una de mis pacientes. En efecto...


El "Pollo" no amenazaba.  Actuaba.
El "Pollo" no amenazaba. Actuaba.
Joven y viuda, al contarme las angustias que pasaba para enfrentar la creciente rebeldía de su hijo adolescente, confesó durante una de las sesiones que nunca le había pegado al muchacho, ya que al aplicarle una medida correctiva de tal naturaleza, ella temía que dejara de quererla.


-- "Temo perderlo, doctor", dijo.

Balbuceando, Angelina añadió:

-- "No quiero que crea y diga que soy una mala madre".

Convenimos que a la siguiente sesión me llevaría a su hijo a consulta, para poder platicar a solas con él y, de esa manera, tener un panorama completo del entorno familiar  que me permitiera ser asertivo en mi diagnóstico y, consecuentemente, más certero en mi trabajo psicoterapéutico.


A la siguiente sesión, en efecto, llegaron los dos y sólo pasó conmigo el joven, quien ya casi para concluir la consulta, y en medio de su rosario de quejas sobre la "agresividad" de su madre, se enderezó del diván y espetó lo que para mí fue el quid de la cuestión, esto es, el núcleo central de lo que estaba pasando entre él y su madre:

-- "¡Pero doctor, ¿cómo no quiere que viva yo alterado, si mi madre se pasa la vida amenazándome...?!"

-- ¿Y te ha golpeado? ¿te ha hecho algún daño? ¿Ha cumplido sus amenazas?, intervine rápidamente.

-- Ah...no, no,. no. Eso sí no...pero me tiene viviendo bajo permanente amenaza.


Así es Miguel Angel Osorio Chong. O cuando menos, así parece que es.


Bueno, ese es mi diagnóstico sobre el hidalguense Miguel Ángel Osorio Chong. Un hombre al que pareciera que todo
Otra amenaza. La salida "dialogada", le falló. El "Pollo" no se fotografiaba.
Otra amenaza. La salida "dialogada", le falló. El "Pollo" no se fotografiaba.
tipo de insurrectos en México le ha tomado la medida. Sólo amenazas y nunca la aplicación de correctivos. Ofreciendo, así,  la impresión de no atreverse a tomar las medidas necesarias para la solución definitiva de los problemas, que han llegado sucesivamente a convertirse en conflictos; conflictos serios para el país. Y así, conforme se fueron agolpando los eventos nacionales que parecen no tener fin, reiteradamente se nutrió mi imaginación con la escena donde recostado en el diván del consultorio, un hombre con la imagen de Osorio Chong, me explica su motivo:


-- "Es que si los corrijo, doctor, temo perderlos.


-- ¿"Perderlos?, don Ángel?", lo inquiero.


-- ¡Pues claro...perder su cariño, su adhesión, su alianza....¡la sucesión, doctor...la sucesión presidencial! Esa, esa, esa es la que temo perder.


Si aplica la ley, si la hace respetar, se enemistará con los guerracivilistas de izquierda...y eso es lo que Osorio Chong, al parecer, no hubiera querido afrontar. Quizá por el temor a tener el veto de la izquierda.


Manuel Camacho Solís (qepd) puso en funcionamiento similar estrategia. Apenas su amigo Carlos Salinas lo designó Regente de la ciudad de México, en vez de aplicar la ley, comenzó a pactar, a negociar con todas las facciones perredistas encargadas de organizar el clientelismo mediante la invasión de banquetas de calles y avenidas. Con ello, pulularon los "ambulantes".  Establecía negociaciones con sus líderes y esperaba granjearse el respaldo de ellos para su proyecto político personal. 


Camacho Solís, con tal proceder,  se convirtió en la antípoda de un hombre que se ganó el respeto de propios y extraños: Ernesto P. Uruchurtu. El llamado "Regente de Hierro", 


Ahora bien, si pasamos revista a los sucesos que han dañado la imagen del Presidente Enrique Peña Nieto, de su gobierno...y del PRI, es donde la figura de la secretaría de Gobernación se ha presentado vacilante, poco firme.


1.- En cuanto a la violencia narco-guerrillera en Michoacán, el equipo político de la Secretaría de Gobernación no pudo terminar con ella. La estrategia de respaldar a grupos paramilitares encabezados por el Gran Maestro masón, José Manuel Mireles Valverde, no dio resultado. Tuvo que intervenir personalmente Peña Nieto y designar a uno de sus hombres de mayor confianza, Alfredo Castillo, para poner en orden las cosas dicha entidad.


3.- La fuga de El Chapo Guzmán puso en evidencia --como lo ha documentado de forma abundante el columnista Raymundo Riva Palacio--,  las graves fallas de todo el sistema de seguridad dependiente de la Secretaría de Gobernación, comenzando por el CISEN, que no ha operado con eficiencia en lo que va del actual sexenio. Como prueba, lo que expuso el columnista el 12 julio del 2015, el 16 de octubre del 2015, el 26 de octubre de ese mismo año, así como el día siguiente, 27 de octubre.


4.-  El caso de Ayotzinapa es también elocuente de los errores tanto de Gobernación como de la Procuraduría General de la República.


5.- Lo mismo puede decirse del conflicto en el Instituto Politécnico Nacional, donde Gobernación pareció operar en discordancia con otras instituciones, al asumir una postura inversa a la de la Secretaría de Educación Pública. ¿O acaso podemos olvidar el hecho de prometer el cambio de director del Instituto Politécnico Nacional?


(tomada de anonopshispano)
(tomada de anonopshispano)
6.- Y hoy puede citarse el caso de la CNTE. No sólo por lo acontecido en Nochixtlán, sino por la secuencia de "diálogos" infructuosos desde antes de la aprobación  de la Reforma Educativa. En lugar de aplicarse la ley, se invitó a los dirigentes a "dialogar", sin antes haber exigido el cese de los bloqueos carreteros y el retorno a sus actividades escolares. La actitud firme del nuevo titular de la SEP, Aurelio Nuño, puso fin al regateo para poner en funcionamiento la Reforma que termina con los privilegios otorgados , en aras de mantener el costoso corporativismo magisterial.


Ahora bien, ¿cómo es posible que los problemas hayan crecido y que la información de Inteligencia no haya servido para evitar el estallido de conflictos como el de Nochixtlán? ¿De qué sirvió la jugosa dotación de estructuras a la Secretaría de Gobernación al inicio del gobierno de Peña Nieto?.


El caso de la Secretaría de Gobernación pareciera lo suficientemente ilustrativo de la validez del viejo dicho: "el hábito no hace al monje".


Esto es, al inicio de la presente administración se reconformó la Secretaría de Gobernación, con el propósito de dotarla de instrumentos que en otros sexenios se le desmontaron. Se empoderándola estructuralmente, podría enfrentar eficaz y eficientemente la conflictividad heredada de los dos sexenio anteriores, producto del Zedillato. No hay que olvidar que el gobierno de Vicente Fox fue cuestionado pública y severamente por Estados Unidos, en torno a su falta de un consistente combate al narcotráfico.


El tiempo ha demostrado que la política nacional no se maneja en base a reformas administrativas.


De poco sirve que se dote a una dependencia de gobierno de los más variados instrumentos, si hay impericia en su manejo, y la falta de decisión para intervenir personalmente en la solución de problemas; evitar que éstos se conviertan en conflictos, y saber operar con firmeza y sabiduría la información de Inteligencia que persuada a los enemigos de las instituciones nacional, de seguir adelante con sus planes.


Fracasaron quienes pretendieron presentar la salida "dialogada" para golpear al secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño. Nos quisieron vender la imagen de un Nuño represor y un Osorio Chong aperturista. 


Es evidente, a este respecto, que nunca vimos al "Pollo", Fernando Gutiérrez Barrios, salir de sus oficinas en Bucareli, en mangas de camisa, para "dialogar" con los rijosos.




Envuelto siempre en el aroma de las más finas fragancias; camisas de algodón a la medida; trajes de finísimo casimir inglés; corbatas de seda siempre a la moda, y con un paladar exigente para el disfrute de la buena comida, el "Pollo" Gutiérrez Barrios no gustaba de las "filtraciones" de los más profundos secretos de los políticos, ni tampoco de la exhibición pública de sus reuniones con los verdaderos líderes de los movimientos insurreccionales. Sin contar con herramientas tan sofisticadas como los drones, ni con los complejos instrumentos de escucha hoy en boga, el "Pollo" operaba en privado, con toda delicadeza, haciendo uso de su trato refinado y voz suave...para solucionar los asuntos. Él mismo se definía en privado como un hombre frío en sus decisiones. Era temible. Sabía del valor de la información. Y del uso de la misma. En vez de "filtrarla", la empleaba en función de las llamadas razones de Estado. No le gustaba salir en la televisión, ni exhibir de sus reuniones. Solucionaba los problemas. Los solucionaba

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